INFORMACIÓN DE SEGURIDAD:
No aplicar directamente sobre la piel. Evitar la luz directa del sol después de su uso. Evitar el contacto directo con los ojos. Mantener fuera del alcance de los niños. Aplicación tópica. La información proporcionada sobre las propiedades y usos de nuestros productos, están basadas en su uso tradicional y popular. Los beneficios de nuestros productos pueden variar según el usuario. Éste es un producto cosmético; en ningún caso sana, mitiga ni previene enfermedades clínicas. En caso de duda sobre sus efectos consulte con su médico o especialista.
PROPIEDADES
El aceite esencial de lavanda es un aceite rico en taninos que le otorgan importantes propiedades antioxidantes, muy beneficiosas para el cuidado de la piel y el cabello. Es ideal en las rutinas de belleza de la piel ya que su efecto reafirmante tersa y nutre la piel ayudando a mantenerla joven y radiante durante más tiempo. En aromaterapia es muy valorado por ser, también, rico en terpenos lo que le otorga propiedades calmantes y relajantes que, junto a su agradable olor, le convierte en el aceite esencial por excelencia de la aromaterapia.
MODO DE EMPLEO
Cuidado de la piel: Añade varias gotas a un disco de algodón humedecido con un poco de agua para una aplicación local. Añade unas gotas de aceite esencial a un aceite vegetal, a modo de portador, y aplicar sobre la piel, para abarcar zonas más amplias. También puedes añadir unas gotas de aceite esencial de lavanda al agua de baño.
Cuidado del cabello: Se pueden añadir unas gotas al champú habitual para revitalizar el cabello y evitar la presencia de piojos.
Masaje: Mezclado con un aceite vegetal como portador, permite disfrutar de sus propiedades calmantes y antioxidantes. Recomendamos utilizar este aceite esencial, junto a nuestro aceite de almendras dulces BIO o nuestro aceite de argán BIO.
Aromaterapia: Añade unas gotas a un difusor y deja que su agradable aroma relaje el cuerpo y la mente, y revitalice los sentidos.